Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

Caminaba Jesús por la orilla del lago de Galilea, cuando vio a Simón y a su hermano, Andrés, echando las redes en el lago, pues eran pescadores. Jesús les dijo: “Síganme y haré de ustedes pescadores de hombres”. Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron. Un poco más adelante, vio a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban en una barca, remendando sus redes. Los llamó, y ellos, dejando en la barca a su padre con los trabajadores, se fueron con Jesús.  (Mc 1:14-20)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/011325.cfm
El Evangelio de Marcos va al grano para contar la historia de Jesús. Jesús empieza a proclamar el Reino de Dios, y después llama a los primeros discípulos. Jesús llama, ellos lo dejan todo y lo siguen. Tal vez el escritor del evangelio nos esté diciendo que la fe es hacer todo lo que Jesús nos pide que hagamos.