Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

En aquellos días, habló Moisés al pueblo, diciendo: Pero ten cuidado y atiende bien: No vayas a olvidarte de estos hechos que tus ojos han visto, ni dejes que se aparten de tu corazón en todos los días de tu vida; al contrario, transmíteselos a tus hijos y a los hijos de tus hijos”. (Dt 4:1, 4-9)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/032322.cfm
Como decía la vieja canción del musical, South Pacific, en otro contexto, “¡Tienes que ser enseñado cuidadosamente!” Aquellos de nosotros a quienes se nos enseñó cuidadosamente” el amor y el respeto por todas las personas, estamos eternamente agradecidos por los padres y abuelos que tuvimos. Es una pena que otros hayan recibido el mensaje contrario. Seguimos rezando por Ucrania.