Queridos hijos: Amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios.
(1 Jn 4:7-11)
El Día de las Madres es el momento perfecto para recordar y decir "gracias" por el maravilloso regalo de nuestras madres (y todas las madres-osos que hemos tenido en nuestras vidas). Nuestras madres nos enseñan esta verdad básica de nuestra fe: amarnos unos a otros. El amor de una madre, como el amor de Dios, es un amor feroz, un amor sacrificado.