He aquí que su Dios,
vengador y justiciero,
viene ya para salvarlos’.
Habrá allí una calzada ancha,
que se llamará ‘Camino Santo’;
los impuros no la transitarán,
ni los necios vagarán por ella.
No habrá por ahí leones
ni se acercarán las fieras.
Por ella caminarán los redimidos.
Volverán a casa los rescatados por el Señor,
vendrán a Sión con cánticos de júbilo,
coronados de perpetua alegría;
serán su escolta el gozo y la dicha,
porque la pena y la aflicción habrán terminado’’.
(Is 35:1-10)
El Volver a Casa que nos espera: es otra figura del Adviento—el volver a casa, simbolizada por un camino, el camino santo para Dios y para nosotros. La foto de hoy es de la Catedral de Milán, Italia, donde San Ambrosio predicó, y por la predicación de San Ambrosio, San Agustín fue convertido a la fe.