Hermanas y hermanos: No queremos que ignoren lo que pasa con los difuntos, para que no vivan tristes, como los que no tienen esperanza. Pues, si creemos que Jesús murió y resucitó, de igual manera debemos creer que, a los que mueren en Jesús, Dios los llevará con él.
(1 Tes 4:13-14)
Todavía estamos dentro del Octavo de los Fieles Difuntos (2-9 de noviembre), y los llevamos con nosotros durante todo el mes de noviembre. Este domingo San Pablo nos recuerda de la enseñanza sobre los que se han dormido en el Señor. Nosotros los cristianos llamamos el lugar en donde enteramos nuestros seres queridos difuntos un “cementerio”, una palabra de griego que significa “dormitorio”, literalmente lugar para dormir, porque los cuerpos dormían hasta el día de la resurrección. La foto es del cemeterio Magnolia en mi pueblo, Mobile, Alabama.
Despiértate, tú que duermes,
levántate de entre los muertos,
y te alumbrará Cristo.
(Efe 5:14)
Johann Sebastian Bach citó la Parábola de las Diez Vírgenes (Mateo 25:1-13) para la cantata, Wachet Auf (Despertad, nos llama la voz), también conocida como Sleepers, Awake (ca. 1731).