Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

Entonces el Señor me preguntó: “Hijo de hombre, ¿podrán acaso revivir estos huesos?” Yo respondí: “Señor, tú lo sabes”. El me dijo: “Habla en mi nombre a estos huesos y diles: ‘Huesos secos, escuchen la palabra del Señor’. (Ezekiel 37:3-4)

Los huesos secos . . . ¡qué visión! Las maravillas que el Señor puede hacer con nuestros huesos secos. Como concluye la lectura:

‘Esto dice el Señor: Pueblo mío, yo mismo abriré sus sepulcros, los haré salir de ellos y los conduciré de nuevo a la tierra de Israel. Cuando abra sus sepulcros y los saque de ellos, pueblo mío, ustedes dirán que yo soy el Señor. Entonces les infundiré mi espíritu, los estableceré en su tierra y sabrán que yo, el Señor, lo dije y lo cumplí’ ”.

Hoy es la fiesta del papa San Pio X (f. 20 de agosto de 1914), el papa de la Santísima Eucaristía. Pio X dio permiso a los niños a comulgar sin recibir el Sacramento de Confirmación y por eso inventó la Primera Comunión. Pio X fomentó comunión frecuente para todos.