Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

El hermano entregará a su hermano a la muerte, y el padre a su hijo; los hijos se levantarán contra sus padres y los matarán; todos los odiarán a ustedes por mi causa, pero el que persevere hasta el fin, se salvará. (Mt 10:21-22)

Este pasaje no aparece en las tarjetas del Día de las Madres ni el Día de los Padres. ¿Por qué una comunidad quería preservar este dicho de Jesús? Debe reflejar la vida real de aquella comunidad. Me acuerdo del sermón más corto. Fue sobre este pasaje: Todos los odiarán a ustedes por mi causa. El predicador dijo: ¿Por qué ellos no nos odian jamás? Y después se sentó. Es muy buena pregunta. Si estamos con los que Jesús quiere . . . pues, todos nos odiarán.

La foto de hoy es Cristo y Los Hambrientos (Christ of the Breadlines) por Fritz Eichenberg (1950).