Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

En todo momento damos gracias a Dios por ustedes y los tenemos presentes en nuestras oraciones. Ante Dios, nuestro Padre, recordamos sin cesar las obras que manifiestan la fe de ustedes, los trabajos fatigosos que ha emprendido su amor y la perseverancia que les da su esperanza en Jesucristo, nuestro Señor. (1 Tes 1:1-5, 8b-10)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/082525.cfm
A veces olvidamos que fuimos elegidos por Dios en Cristo, que Dios nos llamó por nuestro nombre. Hemos sido llamados a las obras de la fe, al trabajo del amor y a la perseverancia en la esperanza. Esa es nuestra dignidad, esa es nuestra misión y nuestro llamado.  https://youtu.be/L2BaQT5xCCw?si=nmHJXZYFkyYGUSD1