Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

Escribe al encargado de la comunidad cristiana de Laodicea: Esto dice el que es el Amén, el testigo fiel y veraz, el origen de todo lo creado por Dios: ‘Conozco tus obras: no eres ni frío ni caliente. Ojalá fueras frío o caliente. Pero porque eres tibio y no eres ni frío ni caliente, estoy a punto de vomitarte de mi boca’. (Apoc 3:1-6, 14-22)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/111924.cfm
Este es uno de los pasajes inolvidables de las Escrituras. Forma parte de las Cartas a las Siete Iglesias (de Asia Menor). Cuando tuve el privilegio de visitar las ruinas de la antigua ciudad de Laodicea en lo que hoy es Turquía, visité la iglesia de Laodicea que está en ruinas y parece haber sido escupida.