Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

Oramos siempre por ustedes, para que Dios los haga dignos de la vocación a la que los ha llamado, y con su poder lleve a efecto tanto los buenos propósitos que han formado, como lo que ya han emprendido por la fe. Así glorificarán a nuestro Señor Jesús y él los glorificará a ustedes en la medida en que actúe en ustedes la gracia de nuestro Dios y de Jesucristo, el Señor. (2 Tes 1:1-5, 11-12)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/082624.cfm
Qué importante es orar unos por otros, llevarnos unos a otros en el corazón cuando venimos al altar del Señor. Al comenzar la lectura de la segunda carta de Pablo a los Tesalonicenses, que todos seamos dignos de las promesas de Cristo para la gloria de Dios.