Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

Salmo Responsorial (Salmo 68)
R/. ¡Respóndeme, Dios mío, por tu gran amor!
A ti, Señor elevo mi plegaria, ven en mi ayuda pronto;
escúchame conforme a tu clemencia, Dios fiel en el socorro.
R/. ¡Respóndeme, Dios mío, por tu gran amor!
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/080224.cfm
Hace mucho tiempo, San Juan Damasceno (675-749) enseñó a la Iglesia que la oración es la elevación de nuestros corazones y mentes a Dios. Podemos poner todas nuestras necesidades ante el Señor con confianza, porque confiamos en el gran amor de Dios por nosotros, revelado en la Cruz y la Resurrección de Jesús.