Noemí tomó al niño, lo puso en su regazo y se encargó de criarlo. Las vecinas felicitaban a Noemí, diciendo: “Le ha nacido un hijo a Noemí”, y le pusieron por nombre Obed. Este es el padre de Jesé, padre de David. (Rut 2:1-3,8-11; 4:13-17)
Rut, la extranjera, le da a Noemí un nieto, que se convierte en el abuelo del rey David, y así Rut se convierte en una de las muchas bisabuelas del Señor. San Pío X, el papa de la Santa Eucaristía, inició la gran reforma litúrgica que dio sus frutos en el Concilio Vaticano II mucho más tarde. Su lema: "Restaurar todas las cosas en Cristo".