Salmo Responsorial (Salmo 17)
R. Sálvame, Señor, en el peligro.
En el peligro invoqué al Señor,
en mi angustia le grité a mi Dios;
desde su templo, él escuchó mi voz,
y mi grito llegó a sus oídos.
R. Sálvame, Señor, en el peligro.
Supongo que todos sabemos que debemos invocar al Señor cuando estamos en peligro, y no es una mala oración. Y como nos recuerda el salmista, Dios escucha nuestra voz, nuestro clamor llega a los oídos de Dios. Como dice la niña: "Dios me escucha".