En aquel tiempo, algunos de los que habían escuchado a Jesús comenzaron a decir: “Éste es verdaderamente el profeta”. Otros afirmaban: “Éste es el Mesías”. Otros, en cambio, decían: “¿Acaso el Mesías va a venir de Galilea? ¿No dice la Escritura que el Mesías vendrá de la familia de David, y de Belén, el pueblo de David?” Así surgió entre la gente una división por causa de Jesús. Algunos querían apoderarse de él, pero nadie le puso la mano encima.
(Jn 7:40-53)
Este es un pasaje muy interesante del Cuarto Evangelio (el que llamamos "Según San Juan". La cuestión de dónde es Jesús es una cuestión central del Evangelio. El Cuarto Evangelio evita la solución de Mateo y Lucas, que dice que Jesús nació en Belén pero vivía en Nazaret en Galilea. El Cuarto Evangelio proclama con orgullo que Jesús es "de Dios" y que nosotros también hemos nacido de Dios.