Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

Jesús les dijo: “Aquel de ustedes que no tenga pecado, que le tire la primera piedra”. Se volvió a agachar y siguió escribiendo en el suelo. Al oír aquellas palabras, los acusadores comenzaron a escabullirse uno tras otro, empezando por los más viejos, hasta que dejaron solos a Jesús y a la mujer, que estaba de pie, junto a él. Entonces Jesús se enderezó y le preguntó: “Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Nadie te ha condenado?” Ella le contestó: “Nadie, Señor”. Y Jesús le dijo: “Tampoco yo te condeno”.
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/040625-YearC.cfm
El hombre más rico del mundo ha dicho que la debilidad fundamental de la civilización es la empatía (compasión). Una vez le preguntaron a Jesús su opinión sobre la empatía, y Jesús respondió: “Aquel de ustedes que no tenga pecado, que le tire la primera piedra”. ¿Seguimos los valores del hombre más rico del mundo o seguimos a Jesús, el Compasivo?