Después de oír al rey, los magos se pusieron en camino, y de pronto la estrella que habían visto surgir, comenzó a guiarlos, hasta que se detuvo encima de donde estaba el niño. Al ver de nuevo la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre, y postrándose, lo adoraron. Después, abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. (Mt 2:1-12)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/010525.cfm
¿Cuál será el regalo que ofrecemos? Además del oro, el incienso y la mirra, tal vez deberíamos considerar ofrecer reconciliación, justicia y paz. Entonces, tal vez, todos podríamos seguir la Estrella juntos como hermanas y hermanos, miembros de una sola familia. El villancico colombiano de hoy es Los Reyes Magos.