Estas reflexiones salen de más que 40 años de ministerio como sacerdote católico. Pasé la mayoría de estos años en la Diócesis de Charlotte que está situada en Carolina del Norte occidental de los Estados Unidos. Ahora, estoy jubilado, y vivo en Medellín, Colombia, y sigo sirviendo como sacerdote en la Arquidiócesis de Medellín.

En realidad, ¿quién es Apolo y quién es Pablo? Solamente somos servidores, por medio de los cuales ustedes llegaron a la fe, y cada uno de nosotros hizo lo que el Señor le encomendó. Yo planté, Apolo regó, pero fue Dios quien hizo crecer. De modo que ni el que planta ni el que riega tienen importancia, sino sólo Dios, que es quien hace crecer. El que planta y el que riega trabajan para lo mismo, si bien cada uno recibirá el salario conforme a su propio trabajo. Así pues, nosotros somos colaboradores de Dios y ustedes son el campo de Dios, la casa que Dios edifica. (1 Cor 3:1-9)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/083122.cfm
Mi amigo, Monseñor Tony Kovacic (1920-2015), nunca habló muy bien el inglés y, además, tenía un impedimento del habla. Trabajábamos juntos por un tiempo en una parroquia cuando comentó: “Algunas personas te quieren. Algunas personas me quieren. ¿No es Dios bueno, que pueden querer uno de nosotros?"