Imprimir

Pienso que a nosotros, los Apóstoles, Dios nos ha puesto en el último lugar, como condenados a muerte, ya que hemos llegado a ser un espectáculo para el mundo, para los ángeles y los hombres. Nosotros somos tenidos por necios, a causa de Cristo, y en cambio, ustedes son sensatos en Cristo. Nosotros somos débiles, y ustedes, fuertes. Ustedes gozan de prestigio, y nosotros somos despreciados. Hasta ahora sufrimos hambre, sed y frío. Somos maltratados y vivimos errantes. Nos agotamos, trabajando con nuestras manos. Nos insultan y deseamos el bien.  Padecemos persecución y la soportamos. Nos calumnian y consolamos a los demás. Hemos llegado a ser como la basura del mundo, objeto de desprecio para todos hasta el día de hoy. (1 Cor 4:6b-15)
https://www.eucaristiadiaria.cl/dia_cal.php?fecha=2022-09-03
Con todas las dificultades de su ministerio, Pablo no habría cambiado de lugar con nadie. San Gregorio (540-605) promovió una renovación del ministerio pastoral en la iglesia.