Imprimir

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Ustedes han oído que se dijo: Ojo por ojo, diente por diente; pero yo les digo que no hagan resistencia al hombre malo. Si alguno te golpea en la mejilla derecha, preséntale también la izquierda; al que te quiera demandar en juicio para quitarte la túnica, cédele también el manto. Si alguno te obliga a caminar mil pasos en su servicio, camina con él dos mil. Al que te pide, dale; y al que quiere que le prestes, no le vuelvas la espalda”. (Mt 5:38-42)
https://bible.usccb.org/es/bible/lecturas/061322.cfm
El “ojo por ojo” fue mejor que la venganza de sangre, pero el Señor nos pide más. San Antonio fue devoto de la Palabra de Dios y luchó con las Escrituras al igual que
el resto de nosotros.